Resumen
- 1 ¿Qué son las caries dentales?
- 2 ¿Cómo reconocer una cavidad?
- 3 ¿A quién puede afectar la caríe dental?
- 3.1 Mala higiene bucal
- 3.2 La ubicación del diente
- 3.3 Algunos alimentos y bebidas dulces
- 3.4 Los bocadillos
- 3.5 Alimentación del lactante
- 3.6 Cepillado inadecuado
- 3.7 Edad: Ser joven o Demasiado mayor
- 3.8 Boca seca
- 3.9 Empastes o aparatos dentales desgastados
- 3.10 Acidez estomacal
- 3.11 Trastornos de la alimentación
- 4 Tratamiento de las Caries
- 5 Complicaciones
- 6 Prevención
- 7 Conclusión
¿Qué son las caries dentales?
Las caries dentales son áreas donde el tejido duro del diente comienza a descomponerse. Los azúcares en los alimentos que comes son descompuestos por bacterias que se acumulan en la superficie de tus dientes. Estas bacterias producen ácido que comenzará a disolver el esmalte y eventualmente la pulpa del diente.
El 92% de los adultos han tenido caries dentales en sus dientes permanentes, según el Instituto Nacional de Investigación Dental. Según los mismos datos, más de uno de cada cuatro adultos sufre actualmente de caries no tratadas. Son más frecuentes en los países subdesarrollados debido al mayor consumo de azúcar simple.
Vienen en dos formas:
- Cavidades con fosas y grietas, que generalmente se forman en las superficies de masticación de los dientes posteriores.
- Suaviza las caries superficiales, que se forman lentamente en las superficies externas planas de los dientes.
Tu dentista está allí para tratar su caries preferiblemente en las etapas más temprana. Pero si se deja sin tratar, las caries pueden acabar devorando todo el diente. Los abscesos resultantes pueden propagar la infección a la raíz y a los tejidos circundantes.
¿Cómo reconocer una cavidad?
Los Síntomas
Los posibles síntomas son:
- Dolor dental
- Sensibilidad dental
- Dolor al masticar o crujir
- Formación de manchas o agujeros en los dientes de color marrón, negro o blanco
- Las caries se forman en varias etapas con posibles complicaciones. Comienza con el desarrollo de la placa.
Formación de la placa
La placa es una película transparente y pegajosa que cubre los dientes. Esto se debe al hecho de que usted come muchos azúcares o almidones y no se limpia los dientes adecuadamente. Cuando los azúcares y almidones no se limpian de los dientes, las bacterias comienzan a alimentarse rápidamente de ellos y forman placa. La placa que queda en los dientes puede endurecerse por debajo o por encima de las encías: es sarro. Esto último dificulta la eliminación de la placa y crea un escudo contra las bacterias.
Ataque de esmalte, dentina y pulpa
Los ácidos de la placa eliminan los minerales del esmalte externo duro del diente. Esta erosión provoca pequeñas aberturas u orificios en el esmalte: esta es la primera etapa de las cavidades. Una vez que las áreas del esmalte se desgastan, las bacterias y el ácido pueden alcanzar la siguiente capa de los dientes, llamada dentina. Esta capa es más suave que el esmalte y menos resistente a los ácidos. La dentina tiene pequeños tubos que se comunican directamente con el nervio del diente causando sensibilidad.
A medida que se desarrollan las caries, las bacterias y el ácido continúan caminando a través de los dientes, llegando a la pulpa que contiene los nervios y los vasos sanguíneos. La pulpa se hincha y se irrita por las bacterias. Debido a que no hay espacio para que la inflamación se expanda dentro de un diente, el nervio es presionado, causando dolor. El malestar puede incluso extenderse desde la raíz del diente hasta el hueso.
¿A quién puede afectar la caríe dental?
Aunque cualquier persona puede desarrollar caries, ciertas condiciones y prácticas pueden ponerlo en mayor riesgo.
Mala higiene bucal
Este es uno de los factores más importantes en las caries, ya que las partículas que dejan los alimentos y las bebidas se descomponen rápidamente en placa, lo que desencadena el proceso de formación de caries.
La ubicación del diente
Las caries ocurren con mayor frecuencia en los dientes posteriores (molares y premolares). Estos dientes tienen muchos surcos, hoyos y rincones, y múltiples raíces que pueden acumular partículas de comida. Como resultado, son más difíciles de limpiar que sus dientes frontales, más suaves y fáciles de alcanzar.
Algunos alimentos y bebidas dulces
Los alimentos que se adhieren a los dientes durante mucho tiempo, como la leche, el helado, la miel, el azúcar, los refrescos, los frutos secos, los pasteles, las galletas, los caramelos duros y los caramelos de menta, los cereales secos y las papas fritas, son más propensos a causar caries que los alimentos que se eliminan fácilmente con la saliva.
Los bocadillos
Cuando mordisqueas o bebes regularmente bebidas endulzadas, te da a las bacterias orales más combustible para producir ácidos que atacan y desgastan tus dientes. Y tomar refrescos u otras bebidas ácidas a lo largo del día ayuda a crear un baño de ácido continuo en los dientes.
Alimentación del lactante
A la hora de dormir. Cuando a los bebés se les dan biberones llenos de leche, fórmula infantil, jugo u otros líquidos que contienen azúcar, estas bebidas permanecen en tus dientes durante horas mientras duermen, alimentando a las bacterias que causan las caries. Este daño a menudo se conoce como caries de botella.
Cepillado inadecuado
Si no te limpias los dientes poco después de comer y beber, la placa se forma rápidamente y las primeras etapas de las caries pueden comenzar.
Edad: Ser joven o Demasiado mayor
Las caries son comunes en niños muy pequeños y adolescentes. Las personas mayores también están en mayor riesgo. Con el tiempo, los dientes pueden desgastarse y las encías pueden retroceder, haciendo que los dientes sean más vulnerables a las caries. Las personas mayores también pueden tomar más medicamentos que reducen el flujo de saliva, lo que aumenta el riesgo de caries.
Boca seca
La sequedad de boca es causada por la falta de saliva. La saliva ayuda a prevenir la carie al remover la comida y la placa de los dientes. Las sustancias en la saliva también ayudan a contrarrestar el ácido producido por las bacterias. Algunos medicamentos, afecciones médicas, antecedentes de radioterapia facial o fármacos quimioterapéuticos pueden aumentar el riesgo de caries al reducir la producción de saliva.
Empastes o aparatos dentales desgastados
Con el paso de los años, los empastes dentales pueden debilitarse, comenzar a descomponerse o desarrollar bordes ásperos. Esto facilita la acumulación de placa y dificulta su eliminación. Los aparatos dentales pueden dejar de ajustarse correctamente, permitiendo que las caries comiencen debajo de ellos.
Acidez estomacal
La acidez estomacal o enfermedad del reflujo gastroesofágico (GERD) puede causar ácido estomacal en su boca (reflujo), erosionar el esmalte de tus dientes y causar daño significativo a sus dientes. Esto expone más la dentina al ataque bacteriano, que crea caries dental. Tu dentista puede recomendarte que consultes a tu médico para ver si el reflujo gástrico es la causa de tu pérdida de esmalte.
Trastornos de la alimentación
La anorexia y la bulimia pueden provocar erosión dental y caries graves. El ácido gástrico de los vómitos repetidos se asienta en los dientes y comienza a disolver el esmalte. Los trastornos alimentarios también pueden interferir con la producción de saliva.
Tratamiento de las Caries
Si notas cualquiera de los síntomas de la carie dental, debe hacer una cita con el dentista para el tratamiento dental apropiado. La caries dental también se puede detectar durante los exámenes dentales de rutina. La opción de tratamiento que ofrece el dentista depende de la extensión y gravedad de la caries dental. Estos son los tratamientos que se utilizan comúnmente para la caries dental:
Rellenos
Este es el tratamiento más común utilizado para tratar las caries. El dentista retira las partes dañadas del diente con una broca y rellena la cavidad con material de obturación. Estos materiales pueden ser aleación de plata, oro, resina compuesta o porcelana. En personas propensas a las caries, el dentista puedes aplicar un material de relleno líquido llamado sellador (que se cura exponiéndolo a la «luz azul»).
Coronas
Los dientes gravemente dañados por las caries dentales pueden requerir una corona o capuchón, que cubre toda la estructura del diente. Las coronas pueden ser de porcelana, oro o aleaciones de metal. El diente se corta antes de colocar la corona (que se hace en un laboratorio dental) se cementa sobre el diente.
Tratamiento de Conducto
Este tratamiento se recomienda generalmente si los síntomas de las caries dentales son muy graves. Las caries profundas pueden infectar la pulpa dental (que incluye los vasos sanguíneos y los nervios) y causar dolor intenso e hinchazón. Esto suele ocurrir si la carie dental no se trata durante las etapas iniciales. El dentista limpia la pulpa dental y la rellena con material de relleno radicular y sella la cavidad. Por lo general, se recomienda una corona después del tratamiento de conducto para proteger el diente.
Extracción dental
Si la infección ha ido demasiado lejos, tu dentista puede tener que extraer el diente, y los síntomas de las caries dentales a menudo se ignoran porque no duran mucho y ocasionalmente ocurren en las primeras etapas. Por lo tanto, es mejor visitar a tu dentista de vez en cuando para asegurarte de que no haya caries.
Complicaciones
Las complicaciones de la caries dental puede incluir:
- Dolor
- Absceso dental
- Hinchazón o pus alrededor de un diente
- Daño o rotura de dientes
- Problemas de masticación
- Un problema de posicionamiento: pueden producirse desplazamientos de dientes después de la pérdida de dientes
Prevención
Una buena higiene bucal y dental puede ayudarte a evitar caries. Aquí hay algunos consejos para ayudarte a prevenir las caries. Para obtener consejos más personalizados, pregunta a tu dentista.
- Cepíllate los dientes después de comer o beber. Has esto por lo menos dos veces al día y, idealmente, después de cada comida. Para limpiar entre los dientes, utiliza un chorro dental. Para ayudarte a encontrar el irrigador dental más apropiado para usted, consulta nuestra guía.
- Enjuágate la boca. Si tu dentista siente que estás en alto riesgo de caries, puede recomendarte que uses un enjuague bucal.
- Visita a tu dentista regularmente. Hazte limpiar los dientes por un profesional y hazte exámenes orales regulares, los cuales pueden ayudarte a prevenir problemas o detectarlos a tiempo.
- Piensa en los selladores dentales. Es un nuevo tratamiento para la caries dental, como medida preventiva: en otras palabras, para prevenir el desarrollo de la caries. Un sello de surco es un revestimiento plástico protector que se aplica a la superficie de masticación de los dientes posteriores. Sella los surcos y rincones que tienden a acumular alimentos, protegiendo el esmalte de la placa y el ácido.
- Evita merendar y tomar bebidas endulzadas entre comidas. Cada vez que comes o bebe bebidas que no sean agua, ayuda a las bacterias en tu boca a crear ácidos que pueden destruir el esmalte dental. Si mordisquea o bebes durante todo el día, tus dientes son constantemente atacados.
- Come alimentos que no dañen los dientes. Algunos alimentos y bebidas son mejores para tus dientes que otros. Evita los alimentos que se quedan atascados en los surcos y las caries de sus dientes durante largos períodos de tiempo, o cepíllate los dientes poco después de comerlos. Sin embargo, los alimentos como las frutas y verduras frescas aumentan el flujo de saliva, como así también el café y el té ayudan a eliminar las partículas de comida.
Conclusión
Como habrás comprendido, una buena higiene dental es esencial y vital. Si no quieres ver a tu dentista demasiado fuera de las visitas preventivas, ¡sigue los consejos que te hemos dado! Esto te ayudará a evitar una serie de problemas! Para más información sobre el cepillado de dientes, les nuestro artículo «Cómo cepillarte los dientes correctamente«.